Páginas

miércoles, 26 de marzo de 2014

La genealogía del Profeta ﷺ: La historia del Elefante




La historia del Elefante



بسم الله والحمد لله والصلاة والسلام على رسول الله ، وبعد

La razón tras la historia de los Compañeros del Elefante- acorde a aquello que fue narrado por Muhammad bin Ishaq [1] – es que Abraha ibn As-Sabah, quien era el representante en Yemen del Negus, Rey de Abisinia, vio a la gente preparándose durante el  tiempo del Hajj para viajar a Makkah- que Allah la enaltezca- y entonces construyó una iglesia en Sana’ y escribió al Negus: «He construido una iglesia para ti y no pararé hasta que haya desviado el peregrinaje de los árabes a ella». Un hombre de la tribu de Banu Kinanah oyó esto, entró en ella por la noche y ensució el Qiblah con excrementos. Abraha dijo: « ¿Quién ha tenido la osadía de hacer esto?» Le fue dicho: «Un hombre de entre los habitantes de esa casa que oyó lo que dijiste». En esto, Abraha juró que se dirigiría a la Ka’bah y la destruiría, y le escribió al Negus informándole de aquello y solicitándole que le enviara su elefante. Él tenía un elefante llamado Mahmûd, de cuya energía, tamaño y fuerza no había sido visto igual y se lo envió.

Así, Abraha salió hacia Makkah y los árabes oyeron de aquello y se volvieron enormemente preocupados por eso, y consideraron que era una obligación sobre ellos combatirle. Uno de los reyes de Yemen, que se llamaba Dhu Nafar salió y luchó contra él, pero Abrahah le derrotó y lo tomó como prisionero y le dijo (a Abraha): « ¡Oh, rey! Perdóname, eso será mejor para ti». Entonces, él le perdonó su vida y lo mantuvo como prisionero, ya que Abraha era un hombre apacible.

Después, procedió hasta que llegó cerca de la tierra de Khath’am, donde Nufail ibn Habib Al-khath’ami salió a su encuentro junto con aquellos que le apoyaban de entre las tribus árabes,  lucharon contra ellos y Abraha les venció y capturó a Nufail, y éste le dijo: « ¡Oh, rey! Yo seré tu guía en la tierra de los árabes y está en mis manos el poder de hacer que la gente te escuche y te obedezca, de modo que perdóname (* la vida) y será mejor para ti». Así que, le perdonó y fue con él, guiándole durante el viaje.

Cuando pasaron por At-Ta’if, Mas’ud bin Mu’tab salió con algunos hombres de Zaqif y le dijo: « ¡Oh, rey! Somos tus esclavos y enviaremos a una persona contigo para que te guíe». Entonces enviaron con él a Abu Righal, que era un esclavo de ellos. De modo que continuaron hasta que llegaron a Al-Mughammas, donde Abu Righal murió y era la suya la tumba que fue apedreada. Entonces Abraha envió a un hombre desde Abisinia, cuyo nombre era Al-Aswad bin Mafsûd, a cargo de una avanzada de caballería y ordenó asaltar el ganado de la gente, Al-Aswad reunió para él la propiedad de los Recintos Sagrados y adquirió doscientos camellos pertenecientes a ‘Abdul Muttalib.

Más tarde, envió a un hombre de Himiar a los habitantes de Makkah y le dijo a él: «Informad a su líder que no he venido a luchar; Solamente he venido a destruir la Casa». De modo que fue y le dijo esto a ‘Abdul Muttalib. ‘Abdul Muttalib respondió: «Somos incapaces de hacerle resistencia; Nos quitaremos de entre él y su objetivo, ya que esta es la Casa de Allah y la Casa de Su khalil, Abraham (Ibrahim, aleihi salam), por lo tanto, si ÉL desea impedírsela (de que la destruya), es SU Casa y si ÉL le deja acercarse a ella, por Allah, que no tenemos poder de impedírselo». Él dijo: «Ven conmigo ante el rey (y dile eso)». Dhu Nafar era amigo de ‘Abdul Muttalib, fue a él y dijo: « ¡Oh, Dhu Nafar! ¿Puedes beneficiarnos respecto a lo que nos ha acontecido?».  Él dijo: «No hay beneficio de un cautivo que no está a salvo de ser ejecutado por la mañana o por la tarde, pero enviaré un aviso a Unais, el mozo del elefante, ya que él es amigo mío y le pediré que impresione al rey  con tu importancia. De modo que este fue a Abraha y le dijo: «Este es el líder de los Quraish pidiendo permiso para verle a usted, ha venido sin rencor hacia usted y sin la intención de desobedecer sus órdenes, luego, desearía que usted le concediera permiso.”

‘Abdul Muttalib era un hombre de fuerza física y hermosa apariencia y cuando Abraha lo vio, le respetó y le trató con distinción; le disgustaba que se sentara junto a él en su diván o que se sentara debajo de él, así que descendió a la alfombra, lo llamó y le sentó a su lado. Entonces, ‘Abdul Muttalib solicitó que le fueran devueltos los doscientos camellos de su propiedad de los que se había apoderado. Abraha le dijo a su traductor: «Dile: Estaba impresionado por ti cuando te vi, pero ahora no tengo nada que ver contigo». Él dijo: « ¿Por qué?». «He venido a la Casa- la cual es (el centro de) vuestra religión y de la religión de vuestros antepasados,  (la fuente de) vuestra nobleza y que está bajo vuestra custodia- para destruirla y no me has hablado de ella, ¿pero (en cambio) me estás hablando de doscientos camellos?». Él replicó: «Soy el dueño de los camellos y la Casa tiene un Dueño que la guardará de ti». Abraha dijo: «Nada puede protegerla de mí». Él respondió: «Eso está por ver». De modo que el Rey ordenó que le fueran traídos los camellos y les fueran devueltos. Entonces, se marchó e informó a los Quraish de las noticias y les ordenó que se dispersaran por los caminos de la montaña y que tomaran refugio en las cimas de las montañas, temerosos de que fueran a ser humillados o asediados por la armada. Así hicieron y ‘Abdul Muttalib fue a la Casa, quitó la anilla de su puerta y dijo:

«¡Oh, Señor! No espero ayuda contra ellos de nadie sino de Ti.
¡Oh, Señor! Por tanto, impídeselo a ellos mediante Tu Protección.
Verdaderamente, los enemigos de la Casa son aquellos que se oponen a Ti,
Luego, impídeles que destruyan Tu Ciudad».

Él dijo también:

«¡Oh, Allah!  Ciertamente el hombre defiende sus propias posesiones,
Por lo tanto, protege Tu propiedad.
Su enojo y su fuerza no pueden vencer Tu Fuerza,
Ellos han traído sus hustes, su tierra entera, y al elefante
Para capturar a los habitantes de TU Casa.
Si los abandonas a ellos y TU Ka’aba, es asunto Tuyo».

Entonces, se volvió en dirección a las montañas con su gente, mientras Abraha llegó a Al-Mughammas y se estaba preparando para entrar en Makkah junto con sus tropas y su elefante. Nufail se acercó al elefante, le agarró de la oreja y le dijo al oído: «Arrodíllate, Mahmud, pues  estás en la Ciudad Sagrada de Allah». Y el elefante se arrodilló. Ellos intentaron que avanzara adelante, pero se negó. A continuación, lo pusieron en dirección a Yemen y este se levantó y avanzó rápidamente, lo giraron hacia Ash-Sham y actuó del mismo modo, luego lo giraron hacia el Este e hizo del mismo modo, entonces, lo giraron en dirección a la Casa Sagrada y el elefante se arrodilló (*nuevamente). Nufail se fue y se apresuró hasta que hubo subido a la montaña. Entonces Allah envió pájaros desde la dirección del mar y cada uno de ellos portaba tres piedras, dos en sus garras y una en su pico. Cuando hubieron sobrevolado donde la gente, las dejaron caer y nadie era alcanzado por estas piedras sin que resultara muerto, pero no todos ellos fueron golpeados.  El resto huyó, llamando a Nufail para que los guiara hacia el camino a Yemen. Ellos corrieron unos por encima de otros en todas las direcciones, cayendo y muriendo en cada pozo. Y Allah le envió una enfermedad  a  Abraha que afectó a su cuerpo, causando que se le cayeran los dedos, hasta que llegó a San’a’, en donde para entonces, parecía ya como un pájaro (desplumado) y no murió hasta que su pecho se hubo dividido abriéndose para revelar su corazón, entonces murió.




[1]  Muhammad bin Ishaq: Escribió una Sirah que no se ha conservado. Ibn Hisham basó su Sirah en ella. Acorde a los sabios del Hadiz, él solía cometer Tadlis (cierta debilidad en la cadena de narradores) y es débil.

*Notas de la traductora al castellano.



Tomado de: Biografía Abreviada del Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Allah sean con él)“Mukhtasar Sirah Ar-Rasul”. Por Imam Muhammad Ibn ‘Abdul Wahab At-Tamimi. (1115-1206 d. H.) Editorial Darussalam, pp. 83-86 (versión inglesa).
Traducido del inglés por Ummu Abderahman Yasmina al Andalussia.

En Tetuán, al Magrib, el 25 de Jumada al Awal, de 1435 Hijra (26/3/2014).
Para 
http://perlasdelislam.blogspot.com/ y el equipo de traducción del foro http://www.islamentrehermanas.forumactif.com/

http://perlasdelislam.blogspot.com/2014/03/la-genealogia-del-profeta-la-historia.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario